El tiempo, como magnitud física, es un elemento importantísimo y determinante para que el usuario valore de forma positiva su experiencia en una web.
Si la tendencia actual en marketing es priorizar al usuario por encima, incluso, del producto no es por una decisión aleatoria, sino porque Internet ha permitido que la oferta de consumo sea infinita, mientras que la paciencia del usuario no lo es. La prioridad del consumidor es “Lo quiero y lo quiero ahora mismo y si no lo encuentro en tu web, me marcho y no porque no me guste lo que me ofreces, sino porque con un clic otra empresa me lo da más rápido” por lo tanto la rapidez de carga y la usabilidad son dos de los requisitos más importantes en la experiencia del usuario.
En tiendas online el factor tiempo cobra aún mayor importancia, teniendo un 18 % más de ventas los ecommerce con una velocidad de carga no superior a 8 segundos. En el comercio online priorizar por categorías, puede reducir de forma notable la tasa de rebote y mejorar la de conversión.
Si se trata de dispositivos móviles la rapidez de carga es aún más importante. Los usuarios se implican y son más fieles con las marcas que les facilitan las cosas, o lo que es lo mismo las empresas que han adaptado sus páginas a los dispositivos móviles.
Los usuarios son tan infieles como agradecidos, por esta razón vale la pena agilizarles el acceso a lo que buscan y no apelar a la paciencia del usuario, ya que el tiempo es oro y el respeto por el tiempo ajeno en internet se traduce en emoción, fidelización y ventas.
La experiencia de usuario es un valor intangible con beneficios tangibles.