Los cambios cuestan, incluso cuando son para mejor y cuando se trata de implementar una estrategia de marketing digital en una empresa, es necesario hacerlo por etapas para evitar el choque entre lo humano y lo digital.
El rigor será una gran aliado en cada una de ellas.
Como tan importante como los objetivos son los recursos disponibles, es recomendable establecer una pequeña escalera en la que subir peldaño a peldaño para llegar, sin ahogos, hasta el ático, donde se sirven cocteles de éxito y hay buenas vistas de la competencia.
- Consultoría: Antes de definir cualquier estrategia es necesario realizar un análisis de situación. Conocer los antecedentes previos, valorar si se han hecho o no acciones anteriores y sus resultados o si, por el contrario, no existe un histórico de marketing digital.
- Recursos: La integración del marketing digital, dentro del plan de comunicación de la empresa debe servir para rentabilizar la actividad, partiendo de datos reales y tangibles, optimizando el presupuesto, incrementando las acciones en función de los resultados extraídos.
- Objetivos: Tras realizar el análisis DAFO y valorar las debilidades (D) hay que definir qué puntos hay que mejorar (atención al cliente, reputación online, visibilidad, comunicación de un nuevo canal de venta online, etc.). Estos serán los objetivos que darán paso al siguiente peldaño.
- Estrategia: Con toda la información recopilada se crea un plan de acción y trabajo en el que se definirán las herramientas necesarias, el calendario de actividades, los actores implicados en cada fase, los tiempos estimados y los resultados que se deberán obtener. En definitiva, la implementación de la estrategia.
- Medición: Conocer el resultado de las acciones realizadas o sin funcionan o no, son datos que deben tenerse presente siempre durante la ejecución de una estrategia de marketing digital, para optimizar a tiempo real el presupuesto. Por lo que la medición, sería la barandilla de la escalera, debiendo permanecer estable junto a cada peldaño.
- Balance: Establecer hitos en el tiempo, para valorar todo lo realizado e invertido es un requisito indispensable para hacer los cambios necesarios en la estrategia.
Subir estos seis peldaños comportan un esfuerzo importante, pero para subir a éste ático no conviene subir en ascensor.
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